Se amplía el beneficio de justicia gratuita para lesionados por accidentes con secuelas permanentes que impidan la realización de la profesión habitual o de las tareas de su ocupación habitual y que van a necesitar de ayuda de una tercera persona, cuando se hayan reclamado daños personales y morales. Esta ayuda será independiente de que se tengan recursos económicos o no para litigar.